Consejos para saber qué hacer con tus sofás nuevos

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Cuando nos toca decidir qué hacer con el sofá o comprar otro para la casa, nos surgen miles de preguntas, las cuales todas dependerán del presupuesto, pero cuando ya lo tenemos en nuestro poder la felicidad es placentera, el problema surge a la hora de instalarlo en nuestro hogar e imaginar cientos de situaciones en donde tu sofá sufre cualquier calamidad, catástrofe o hasta un destino final… Sin embargo, las soluciones llueven a ti y con ellas nuevas dudas, las cuales responderemos y aclararemos tu dilema.

¿Tapizar el sofá o comprar uno nuevo?

Haz llegado a un punto en el que te toca elegir, entre tapizar el sofá viejo de la sala, la cual ha soportado años contigo o, comprar uno nuevo y olvidarte por completo de tantos días compartidos con el anterior.

Si decides comprar uno nuevo y botar el viejo sofá que ha estado en todos tus recuerdos en los últimos años… Debes considerar tu decisión nuevamente.

El mercado actualmente te ofrece diferentes tipos de sofá, debido a la creatividad de los diseñadores que lanzan sus diseños al mercado, y cada uno de estos cuentan con diferentes tamaños, largos, agregados, cojines, marcas, con gabinetes o no, detalles en la tela o en los almohadones, distintas bases hechas de madera o metálicas, e infinidades de detalles que, ¿estarás dispuesto a considerar? Sin mencionar que cada característica afecta de una manera porcentual tu bolsillo, ya que cada día la economía nos afecta de diferente manera, ya sea negativa o positivamente, y recuerda, si te enamoras de un sofá que está a un muy buen precio, ¡cuidado! La calidad del sofá es fundamental a la hora de comprar uno nuevo, ya que queremos evitar cambiarlo por otro nuevo en menos del tiempo imaginado.

Si decides renovar tu viejo y querido sofá, sea prehistórico, un regalo no deseado, pequeño o simplemente degastado y no sabes qué hacer con él, tenemos distintas variables a considerar, ya que debes recordar que el tapizado no es eterno, éste se deteriora y puede llegar a romperse, pelarse o rasgarse por las zonas de mayor uso, como lo son los benditos posabrazos, pero, esto solo depende del tiempo, el uso y el cuidado que le sigas dando después del cambio, debes tomar en cuenta el precio que conlleva este nuevo cambio de look, ¡ojo! ya que algunos tapizados cuestan lo mismo que gastarías comprando un nuevo sofá moderno o hasta más, entonces, ¿los recuerdos lo valen? La calidad del tapizado juega un papel fundamental y qué tanto necesitas tapizar a tu buen amigo, sofá. Si te has inclinado por esta opción quiere decir que valoras los recuerdos pero piensas en el futuro y el cambio, si quieres introducir o agregarle modificaciones drástica a tu sofá exponle tus ideas al tapicero, escuchando atentamente sus opiniones y consejos basados en tus necesidades ya que no todos los cambios resultan viables, algunos pueden comprometer la comodidad, estética o hasta la durabilidad del sofá.

Consejos para elegir tapizado

Decides por ir a hablar directamente con el tapicero y él, encantado, te muestra cientos de opciones de tela para tapizar tus muebles, tú, al ver tanta variedad no sabes cuál elegir, si depender del factor belleza o durabilidad, pero, no son los únicos factores que deberás tomar en cuenta para una decisión, hay más, y necesitarás tomar nota de los siguientes:

Primero que nada debes tener en mente una proyección del espacio donde se encuentra tu mueble a tapizar, las características que necesitan ser resaltadas del lugar porque no se aprecian, no resaltan o cuentan con defectos que quieras eliminar o modificar porque suelen desagradarte o ser los más criticados de tus visitas.

Luego podrás empezar con la tela base la cual vestirá tu sofá y dará iluminación y contraste a tu espacio, ésta tela debería ser lisa, la cual podrás combinar con aspectos de la sala y otro tipo de estampados o telas que quieras adicionar, como otros colores que hagan juego y juntos recreen un ambiente fresco y acogedor, ya sean colores cremas, oscuros o claros que unifiquen la atmosfera, para ello puede que los estampados y telas con relieve o bordados no te convenzan del todo por indecisión y es que puedes usarlos para decorar, pero no excesivamente.

¡Advertencia! Si deseas descartar tus opciones y empezar la elección del tapizado tomando en cuenta solamente su color o el diseño que más te han llamado la atención, no estarías haciendo lo correcto. Es recomendable que te centres en su composición, ya que cada una de estas cuentan con características que las describen y ciertamente pueden favorecerte más o menos. El grosor de la tela no garantiza su calidad o resistencia, por ello el asesoramiento de algún experto no viene mal, ya que lo fundamental para esto es el tipo de tejido y su cuidado.

Y por último, la opción resistencia y durabilidad, ¿el tapizado debe soportar años de vida dura con niños inquietos correteando y saltando de un mueble a otro o  necesitas un balance que llegue al equilibrio armónico de tu hogar, simplemente guiándote por la belleza? La clave son las telas compactas y resistentes. También debes recordar las partes más frágiles del sofá, como lo son los posabrazos, los cuales necesitarán mayor protección, con ello se recomienda un tapizado tipo funda que forre y mantenga, porque la versatilidad de la tela nos facilitará su mantenimiento.

¿Cuándo debo tapizar un sofá?

A la hora de remodelar o cambiar tu diseño, te sientas a pensar en la combinación de colores, espacios o diseños que tienes en tu hogar y qué cambios pudiera mejorar el actual o si será buena idea cambiarla por completo. Entonces decides pintar las paredes, cambiar algunos cuadros, cambiar las cortinas y sacar las alfombras, te detienes a observar y algo no cuadra, ¡los sofás siguen siendo los mismos!

Si llegaste a este punto, es hora de tapizar tu sofá. Motivo: Encontrar el contraste de tus sueños. Esta razón es la más válida de todas, y una decisión bastante fácil de tomar, solo debes pensar qué color o diseño culminaría tu obra maestra de decoración. Si llegas a tener un sofá marrón y haz pintado las paredes de color vinotinto y por tus ventanas no entra suficiente iluminación, tapizar con un color claro es la solución.

Pero si tu situación es otra y empiezas a notar que tu sofá se hunde cada vez que alguien se sienta o cada vez que te levantas del sofá notas una depresión marcada en él, lamentablemente estos son síntomas de la antigüedad, años de uso y deterioro sin cuidado alguno; tú sofá está en mal estado. Y para ello necesitas renovarlo, y una de las opciones que tienes es tapizarlo, teniendo en cuenta su desgaste puedes intercambiar su relleno con una nueva goma espuma, para que cuando éste forrado se vea como nuevo.

Si en cambio, tienes días intentando limpiar una mancha que no habías visto antes y al parecer, tiene días allí, e intentas todo, productos químicos, limpiadores especiales, sprays, vapor, y aún así no se va, ¡no te quedes sin esperanzas!, tal vez es hora de emendar tu error imborrable, sí, es hora de tapizar tu sofá sin otra alternativa. Podrás empezar una vida nueva sin preocuparte más por ese detalle que habita en el interior del mueble, ¡será un secreto entre tú y el tapicero! Ahora solo debes enfocarte en no volver a cometer el mismo accidente y mantener limpio tu nuevo y mejorado sofá.

Aunque también existe la posibilidad de que tu sofá ya esté tapizado y quieras retapizarlo, pero, ¿es necesario? Y es que el tapizado no es infinito y sin el debido cuidado puede llegar a dañarse, quebrarse, pelarse y romperse, y es allí cuando debes preguntarte si es hora de retapizarlo; ya que podría durar más tiempo junto a ti.

Tipos de tapizado para sofás

A la hora de decidir sí tapizar o no debemos considerar qué tipo de tapizado elegiremos para nuestro sofá, porque existen varias opciones que puedan favorecerte y otras que no.

Tenemos, por ejemplo, el teflón, una tela excelente para repeler el agua, considerado el tapizado anti-manchas, evitando así que el sofá absorba líquidos como aceites o gaseosas y cree manchas de humedad, ya que estos no penetran el interior, haciendo el trabajo de limpieza más cómodo y seguro, aumentando la durabilidad de nuestro sofá.

El cuero o la piel son las más atractivas en el mercado, por su gran comodidad y elegancia, no obstante deben limpiarse adecuadamente para evitar las manchas y el deterioro, también dependen de su calidad porque puede desteñirse con el tiempo.

También están otras telas como son el algodón, el lino, la lana y la seda; siendo cada una de estas fibras frecuentemente usadas, con una variedad de calidad y durabilidad diferentes. Estos tipos de tela son frescos, flexibles, resistentes, agradables al tacto y con la opción de ser removibles a la hora de limpiarlas, con la negativa de ser las más pedidas en el mercado, fáciles de arrugar y no siempre están a un buen precio.

De este tipo de telas, como el algodón, han surgido telas sintéticas de microfibra, como la sweet, que son totalmente lavables y retardantes al fuego, esto quiere decir que no fácilmente empiezan a arder, esta tela es llamada suede, la cual cuenta con diferentes calidades, por ello es importante leer sus propiedades antes de elegirla.

La cretona, es una tela compuesta por fibras de algodón y ligamentos de tafetán; derivado de la seda. Usado comúnmente en cortinas, chaquetas y muebles.

La loneta es otro tipo de tela de gran cantidad en el mercado y fácil de usar tanto en sofás como en cortinas, es fuerte, impermeable, resistente y flexible, mucho más fina que la lona, ya que son tejidos de colores claros, en su mayoría con rayas verticales. Al igual que la Chenille, una tela que cuenta con una textura aterciopelada porque sus hilos pueden estar compuestos por lana, algodón o fibras sintéticas. Recomendado por su suavidad.

Actualmente existen nuevas tecnologías en las telas, las cuales se adaptan a nuestras necesidades de durabilidad y mantenimiento, las cuales forman parte de una familia de telas que derivan de otro tipo de tela base que han sido mejoradas, llamadas Mystic, Otaru, Moon, Eden, Minerva, entre otras más que son suaves al tacto, aterciopeladas y con variedad de tonalidades, cada una de ellas cuentas con la tecnología aquaclean; hechas especialmente para un limpiado nada profundo, utilizando solamente agua y un paño seco para remover, porque ésta no deja entrar los líquidos derramados en ella y cuenta con fibras flexibles y resistentes a las garras de tu mascota, anti ácaros, y con variedad de diseños como estampados de flores, rayas, figuras y una gama de colores disponibles para cualquier gusto.

¿Cuánto cuesta tapizar un sofá?

El momento ha llegado, y es hora de sacar una hoja y un papel para empezar a escribir los diferentes tipos de telas para tapizar que te interesaron y que posiblemente quieras usar, tomando en cuenta sus características que dependen del fabricante, ya sea de su color, tamaño, peso u otros aspecto individual, su precio variará, luego está la mano de obra del trabajador que ejecutará nuestro tapizado, los retoques estructurales internos que hagan falta para realizar la acción, llámese goma espuma o derivados del plástico, o un cambio de madera, aluminio o resortes, alguna limpieza profunda y alguno que otro transporte del sofá, ¡qué locura! ¿Ya puedes imaginar la cantidad de ceros que aparecerán en tu factura? Pero no hay de qué preocuparse, por lo general el precio del tapizado es menor al costo de una nueva adquisición.

Para llegar a conocer el precio exacto que lleva tapizar un mueble en perfecto estado, debemos tomar en cuenta el tipo de tela que compramos para revestir el mueble, si esta es una tela muy costosa, lujosa y fácil de arrugarse, la mano de obra cobrará un 40% de ese precio, ya que deben manejar la tela con máximo cuidado. Pero en cambio, si no se les facilita la tela y ellos deben comprarla, podrán cobrar por encima del 50% de lo que les costó.

Pero, si la situación cambia y ya no estamos hablando de un sofá en perfecto estado sino que al contrario, es el sofá que tiene más de veinte años guardado y que normalmente las mascotas usaban sin control para saltar o acostarse en él y rasguñarlo. Se encontrará en un deterioro notable, costará el doble de atención de la que comúnmente se le daría a un sofá en mejores condiciones, ya que este puede necesitar hasta una limpieza profunda anti ácaros con productos especiales, cambio de algunos accesorios internos ya oxidados, o una renovación total del relleno tanto de los cojines, como de los posabrazos, y a la lista se le podría agregar otras herramientas como la pega, grapas, tachuelas, ganchos de presión, o clavos dependiendo de lo que se necesite. La factura, sin contar el costo de la tela y los materiales a usar, podrá alcanzar el 80% en mano de obra.

Existe una opción más económica la cual lleva el doble o el triple de trabajo pero, esta vez, sin tener que pagárselo a otra persona, o directamente a un grupo de trabajadores, ya que podrías hacerlo tú mismo, siguiendo las correctas instrucciones de un experto podrás lograr una completa renovación a tu gusto y exigencias. Solo debes recordar que necesitaras comprar los instrumentos necesarios para poder desvestirlo por completo, capa por capa. Podrás descubrir que algunos de los instrumentos necesarios para retapizar tu sofá se encuentran en tu propia casa, solo necesitas paciencia y dedicación. Al descubrir el interior de tu sofá podrás dar rienda suelta a tu creatividad, revistiendo con el material que más te convenga, ya sea cartón, fibra, tela o plástico, entre otros.

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